La Fiscalía General de la República (FGR) confirmó la detención, en Tijuana, de Jorge Antonio ‘N’, identificado como el segundo tirador contra Luis Donaldo Colosio.
De acuerdo con la exagente del desaparecido Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) y actual directivo de la firma Peak Growth Capital.
La captura, ejecutada en Tijuana mediante una ficha roja de Interpol, revive uno de los capítulos más polémicos de la historia política mexicana: el asesinato del entonces candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio Murrieta, ocurrido en 1994 en Lomas Taurinas.
De acuerdo con informes federales, se trata de la segunda ocasión en que Sánchez Ortega es arrestado por su presunta participación como segundo tirador en el homicidio del político sonorense. En esta nueva acción judicial, la FGR asegura contar con pruebas que lo vinculan directamente con el magnicidio que marcó un antes y un después en la vida política del país.
El Registro Nacional de Detenciones confirmó que la aprehensión ocurrió este sábado 8 de noviembre en la ciudad fronteriza, en cumplimiento de una orden federal de captura.
Los antecedentes del detenido en el caso Colosio se remontan a los momentos posteriores al crimen, cuando fue asegurado por portar una chamarra con manchas de sangre perteneciente a la víctima y dar positivo a la prueba de rodizonato de sodio, utilizada para detectar residuos de disparo. En las pruebas periciales realizadas entonces se hallaron rastros biológicos de Colosio en su ropa y evidencia química que lo ubicaba en el entorno inmediato del ataque.
La FGR sostiene que, en 1994, el hoy detenido se encontraba asignado a la cobertura de seguridad del candidato presidencial como parte del CISEN. Además, versiones publicadas por medios nacionales apuntan a la posible intervención del entonces subdirector operativo del organismo, Genaro García Luna, acusado de encubrir la participación del segundo agresor y facilitar su huida de Tijuana tras el asesinato.
La reciente captura de Sánchez Ortega, obtenida mediante colaboración internacional y con apoyo de Interpol, también se relaciona con investigaciones por presunto fraude financiero ligado a la empresa Peak Growth Capital. Hasta el momento, las autoridades no han informado sobre su situación jurídica ni sobre los próximos pasos procesales, aunque la detención reabre un expediente que durante tres décadas ha sido símbolo de la impunidad y el misterio en la política mexicana.








