El coordinador estatal de la Central Cardenista Campesina, Mario Reyes Cantú, se pronunció por sacar los granos básicos como trigo, maíz, sorgo y frijol, entre otros, del esquema comercial del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y de la Bolsa de Valores de Chicago, así como por establecer una política soberana de crédito para el sector agrícola.
La organización campesina agraria, señaló que el gobierno de la 4T tiene que hacer todo lo posible porque los granos sean excluidos del T-MEC en la renegociación que se realizará de este acuerdo.
Si bien el precio de los granos no es responsabilidad del gobierno morenistas al fijarlo la Bolsa de Chicago, sí lo es el lograr que se excluya la cláusula de granos del T-MEC que genera una competencia desleal con los cultivos mexicanos.
«Las asimetrías que se establecen en el tratado comercial, sigue siendo lo mismo que los precios, ellos tienen grandes subsidios, los productores gringos reciben 20 mil dólares por hectárea, pero a final de cuentas ellos pueden venir a regalar maíz y nosotros tenemos que buscar un precio que garantice la competencia», dijo.
Criticó la política pública de México destinada al sector, ya que precisó “no debe confundirse soberanía agrícola con autosuficiencia absoluta, esto nos hace referencia a la capacidad de un país para decidir cómo, qué y para quién produce sus alimentos, priorizando la producción local”.
Reyes Cantú refirió que “por supuesto, también debemos hablar de justicia social, sustentabilidad y respeto a la cultura alimentaria que, en el caso de México, está sustentada en el maíz”.
Dijo que ahora tiene que ser el gobierno de Claudia Sheinbaum el que renegocie el T- MEC y este es el momento de que saque ese capítulo o cláusula comercial que tanto ha dañado a la agricultura mexicana.
«Un asunto de 30 años que ya creó raíces, el tratado comercial es en general y no es fácil para la presidenta, lo que tendría que buscarse es la equidad entre las naciones, pero hay que hablar con realidades, es la primera potencia del mundo, no está fácil», concluyó.








